Se me acabó la fuerza

De la mano izquierda...

Domingo de fútbol, y el Real Bañil deseaba cobrarse venganza de la humillación de la semana pasada. Armamos un buen cuadro, y se ve que el entendimiento empieza a mejorar. Acabamos el primer tiempo ganando 1-0 con una buena actuaciñon de la defensiva. En el segundo lapso la defensa se desdibujó y con dos tiros de larga distancia nos dieron la vuelta en el marcador. La moral empezaba a decaer, y el tercer tanto parecía inminente. De pronto, una descolgada del rival, una mala marca la la oportunidad propicia para hacer el tercer tanto. Desesperado, salí a tratar de cerrar el ángulo de disparo. El delantero patea fuertemente el esférico. Logré reaccionar y desviar a corner. Lo malo, la fuerza del disparo y el poco tiempo de reacción hicieron que no colocara las manos como debía; de la potencia del tiro la mano izquierda se me dobló completamente y el dolor fue insoportable al instante. La muñeca se me hinchó sobemanera y por tanto dolor abandoné el terreno de juego. Lo bueno que chío me dió inmediatamente un masajito y la inflamación cedió un poco. Supongo que por lo inflamado de los nervios el dolor persistirá por un par de semanas... al final, se obtuvo el triunfo por 3-2 pero tendré que dejar de jugar por un buen rato para que la lesión sane completamente. Al menos termina ya pronto el semestre y no tendré que estar escribiendo tanto en computadora, pues eso duele demasiado. Ni modo, por unos días no podré cargar objetos ni abrir frascos... chin... tanto que me duele la manopla, y no podré abrazar a mis amigas ahora que se acerca mi cumple... en fin...

Al final no me quedó más que tomarme la foto del recuerdo... aaay, mi mano!!!